En plena pandemia, mientras muchos negocios cerraban y otros buscaban reinventarse, Pedro Ballatore y sus hermanas, María y Catalina, decidieron darle vida a un proyecto que combinara su pasión por la gastronomía con una propuesta de calidad: acercar a los hogares argentinos los sabores más exquisitos de Europa. Así nació Say Cheese, una tienda gourmet especializada en quesos, fiambres y productos seleccionados que hoy se consolida como referente en el rubro.
“Empezamos ofreciendo nuestros productos puerta a puerta, buscando acercar esas experiencias de sabores del mundo que nos apasionaban”, recuerda Pedro. La respuesta fue tan buena que pronto abrieron su primera tienda física en Remeros Plaza Shopping y sumaron un e-commerce que les permitió llegar aún más lejos. Además, el local ofrece un espacio para disfrutar bocatas con sabores internacionales, convirtiendo la compra en una experiencia.
Calidad sin atajos: la clave está en los detalles
La propuesta de Say Cheese se destaca por una curaduría detallista y rigurosa. “Seleccionar nuestros productos es un proceso que tomamos muy en serio”, cuenta Pedro. No se trata solo de probar y elegir lo más sabroso, sino de considerar aspectos como el origen, la crianza del animal, la maduración del producto y, en muchos casos, si tiene D.O.P (Denominación de Origen Protegida).
Entre los productos estrella se destacan los jamones españoles, con maduraciones que van desde los 14 hasta los 84 meses, y el Parmigiano Reggiano, que Pedro define como “nuestra reina”.


Superar obstáculos sin perder la esencia
Uno de los grandes desafíos fue el contexto económico argentino, especialmente las restricciones a la importación. “Hubo momentos donde conseguir determinados productos se volvió casi imposible”, recuerda. Para resolverlo, comenzaron a incorporar productos nacionales que mantuvieran el estándar de calidad de la marca. “En los momentos de incertidumbre, tratamos de tomar decisiones rápidas y buscar soluciones sin perder nuestra esencia”.
Como emprendedor, Pedro valora el aprendizaje constante: “Desde cómo seleccionar un producto hasta cómo gestionar un equipo o mejorar el vínculo con nuestros clientes. Emprender es un camino de prueba y error, de estar atentos al contexto y a lo que el país nos permite en cada momento”.

Más que una tienda: una experiencia
En Say Cheese, el foco está en la experiencia del cliente. Desde la atención personalizada hasta el empaque de cada producto, todo está pensado para generar cercanía. “Queremos que cada persona que nos elige se sienta cómoda, bien atendida y acompañada”, asegura Pedro.
Además de la tienda, ofrecen servicios de catering para eventos, con mesas de quesos y fiambres para casamientos, cumpleaños o encuentros corporativos. También realizan degustaciones y experiencias sensoriales, combinando gastronomía con actividades como astrología o cerámica. “Nos gusta jugar con los sentidos y explorar nuevas formas de conectar con la comida”, explica.


Mirada al futuro y expansión
El presente de Say Cheese es sólido, y hoy el equipo está 100% enfocado en potenciar al máximo su tienda actual. “Estamos todo el tiempo buscando mejoras: desde la presentación de las picadas hasta incorporar combinaciones nuevas que sorprendan al paladar, como un panal de miel en un brie”, cuentan. “El objetivo es seguir creciendo sin perder la esencia”.
También preparan el lanzamiento de nuevas líneas de productos de Francia e Italia, incluyendo papas francesas, conservas italianas y una selección exclusiva de trufas para fin de año. “Cada incorporación pasa por nuestro filtro. Solo elegimos lo que nos emociona, lo que probaríamos y recomendaríamos sin dudar”, destaca Pedro.
Un mercado en expansión
Sobre el futuro del sector gourmet en Argentina y la región, Pedro es optimista: “Vemos que el mercado gourmet está creciendo muchísimo. Hay más personas interesadas en productos de calidad, más lugares especializados y un público mucho más informado”.
Con una visión clara, pasión por el detalle y una apuesta por la autenticidad, Say Cheese no solo vende productos: invita a vivir una experiencia gastronómica que celebra el sabor, el origen y la historia detrás de cada bocado.
